Me vuelvo a encontrar con insomnio. Trois Gymnopedie entra y sale de mi conciencia a su gusto por mis oidos, a veses olvido que estoy escuchando algo porque solo oigo el dictado de mi conciencia. No se ha inventado nada mejor para el comezón que rascarse; alimento a decenas de mosquitos aedes aegypti cada madrugada.
Soy su fuente de vida, les creo un lugar donde depositar sus larvas; en el patio de mi clinica, eternamente inundado. Les doy un lugar donde esconderse, entre todas las cosas dispuestas desordenadamente por mi cuarto. Los alimento con mi sangre todos los dias. Y cuando llego al límite de mi paciencia los enveneno o los mato a palmadas. ¿que soy yo para esos mosquitos?
¿Dios? nada mas tonto.
Soy solo un eslabón en su cadena alimenticia. Soy su presa.